La pandemia ha impulsado un cambio en el modelo de enseñanza educativa lo que provocó una transición a un modelo híbrido generando un mayor acceso a la educación y al conocimiento, que en un principio dio temor (el temor natural que da lo nuevo) pero que planteó nuevos desafíos y afloró aún más la vocación de nuestros maestros petersonianos, un desafío que fue inmediatamente asumido y con el cual empezó nuestra preparación.

Nuestra institución siempre se ha caracterizado por varios aspectos entre los cuales la innovación continua, nuestra vocación y la corresponsabilidad de los padres de familia son los pilares del éxito que se está obteniendo en este reto adquirido y que hace que no solo nuestras metas planteadas desde el año anterior no cambien, sino que hasta se expandan, permitiéndonos proporcionar una educación de calidad pese a la pandemia.

Clases de Lenguaje con la Miss Andrea

Utilizando una serie de herramientas que no solo se enfocan en las tres horas de clases virtuales sino también en las tres horas de clases asincrónicas a través del uso de herramientas tecnológicas adecuadas a cada edad, complementándolas con clases de refuerzo según la necesidad de nuestros estudiantes, cumpliendo con un proceso de enseñanza-aprendizaje personalizado ya sea para reforzar contenido académico o para dar apoyo a los estudiantes de necesidades educativas. Nuestros horarios flexibles optimizan esta relación y en el caso de educación inicial permite al representante escoger el horario más adecuado a sus necesidades (mañana o tarde).

Nuestra amada triada educativa ha sido propulsora de este crecimiento y es ahora la protagonista de esta nueva realidad, una nueva realidad en la que juntos (maestros y padres de familia) estamos facilitando conocimiento, generando aprendizaje y criterio propio en nuestros niños y jóvenes. 

Clase personalizada con la Miss Roxana Mancilla

Por esta razón aprovecho este artículo para agradecer a nuestros maestros, alumnos y padres de familia por el maravilloso trabajo realizado durante este primer parcial, que como institución nos llena de orgullo y nos permite ratificar una vez más que para la Familia Petersoniana no hay límites.

Deja un comentario